Cobijada verano del 18
El día que la Cobijada se hizo mayor


Durante los años que viví en Vejer de la Frontera mi vínculo con la Cobijada (figura símbolo de este precioso pueblo) se hizo cada año más fuerte.
Además de pintar varias cobijadas cada verano, también me encargaron los trofeos del concurso de Sunset Beach Polo que se organizó en la Playa del Palmar. Pero he de reconocer que desde que me mudé más cerca de la playa, hace ya dos años, no había pintado ninguna más.

A raíz de la realización en 1986 de leones pintados en Suiza que se transformó en la CowParade y ha tenido su más reciente derivación en las Meninas que han adornado las calles de Madrid esta pasada primavera, han sido muchas las ciudades que han llevado a cabo esta iniciativa. Pero es bastante sorprendente y una apuesta innovadora y arriesgada para una ciudad más pequeña o para un pueblo, como es este caso.
Cuando me comentaron que no me pagarían nada por el trabajo, me dio por pensar que hay que mejorar la consideración del Arte y de los artistas como valor necesario, así que me gustaría escribir un post más adelante sobre esto.
Decidí aceptar el encargo para regalarle algo a Vejer por el cariño que le tengo a esta localidad y a sus habitantes y por los buenos años vividos allí.
